Optimizarán capacidades para la protección física en instalaciones que poseen material radiactivo

Asistentes al taller

Con el fin de que los operadores de instalaciones radiactivas y autoridades reguladoras del país desarrollen e implementen planes de seguridad que optimicen las capacidades de protección física y de gestión de la seguridad de las fuentes radiactivas, la Comisión Chilena de Energía Nuclear (CCHEN), junto a Sandia National Laboratories del Departamento de Energía (DOE) de EE.UU., organizaron un taller en el que se discutieron las bases sobre las cuales se desarrollarán estos planes en las instalaciones radiactivas del país.

Desde EE.UU., participaron Jeff Jarry, Charlie López y Justin Walker, quienes trabajaron con los participantes, aunando criterios para la elaboración de los Planes de Protección Física, como parte de una cooperación permanente que existe entre ambas instituciones.

“Generamos un muy buen vínculo con este grupo de trabajo que, al estar representado por 14 diferentes organizaciones, nos permite graficar de manera más precisa, la forma en que se trabaja con material radiactivo en Chile y así, apoyarlos en la elaboración de sus respectivos planes de protección física”, señaló Jeff Jarry.

La actividad contó con la asistencia de cerca de 30 representantes de organismos, tales como la Agencia Nacional de Inteligencia (ANI), Grupo de Operaciones Policiales Especiales (GOPE) y Ejército de Chile, así como también de instituciones médicas e industriales que cuentan con instalaciones radiactivas, además de funcionarios de la CCHEN.

“Si bien hay ciertos elementos de protección física que se le exige a las empresas que operan con material radiactivo, aún no hay un reglamento estandarizado”, señaló Fernando Vega, profesional a cargo de esta actividad por parte de la División de Seguridad Nuclear y Radiológica de la CCHEN, quien complementó que “precisamente, este taller busca, por una parte, crear los planes de protección física para este tipo de instalaciones, uniformando criterios y protocolos, y por otra, preparar a las instalaciones para cuando ese nuevo reglamento entre en vigencia”.

Según se definió entre los participantes, el paso siguiente es consolidar la propuesta en un formato que será enviado a la División de Seguridad Nuclear y Radiológica de la CCHEN para su revisión. Luego, se definirá una próxima visita de los profesionales de Sandia National Laboratories, posiblemente el último trimestre del año, con el fin de revisar y consensuar una versión final.