Trece países de América Latina se capacitaron en uso de isótopos estables para evaluar eficiencia en el manejo del agua

Cerca de 20 representantes de 13 países de Latinoamérica asistieron en Chile al primer curso regional sobre isótopos estables (oxígeno-18, hidrógeno-2 y nitrógeno-15) para evaluar la eficiencia en el uso del agua y su relación con la evapotranspiración en sistemas agrícolas. En ese contexto, se desarrollaron jornadas teóricas, trabajo práctico en el laboratorio e, incluso, hubo una salida a terreno a la Facultad de Ciencias Agronómicas de la Universidad de Chile.

Lo anterior, se enmarcó en un proyecto del Acuerdo Regional de Cooperación para la Promoción de la Ciencia y Tecnologías Nucleares (ARCAL), “Mejora en la eficiencia en el uso del agua asociada a estrategias de adaptación y mitigación al cambio climático en la agricultura”, donde CCHEN es primera contraparte, junto a la Facultad de Ciencias Agronómicas de la Universidad de Chile.

“Se ha solicitado a Chile como país sede del primer curso de capacitación, dada la experiencia con la que nuestro país cuenta en la ejecución de proyectos de ARCAL, los buenos resultados obtenidos a la fecha y sobre todo, por la importante base de conocimientos relacionados con el tema del proyecto”, señaló Adriana Nario, jefa del Departamento de Tecnologías Nucleares de la CCHEN.

Evaporación y transpiración

Uno de los objetivos fue capacitar a los participantes en el uso de técnicas isotópicas para evaluar la evaporación y la transpiración del sistema suelo planta, mediante el análisis del balance de masas y la metodología keeling plot.

Es importante hacer hincapié en los conceptos de evaporación y transpiración del sistema suelo/planta. El primero es el mecanismo mediante el cual el agua es devuelta a la atmósfera en forma de vapor, como parte del intercambio constante de agua entre océanos, continentes y atmósfera. La transpiración, en tanto, es un proceso biológico, realizado por los vegetales.

Aunque ambos mecanismos son diferentes y se realizan independientemente, resulta difícil separarlos, pues ocurren en forma simultánea, de ahí que se emplee el concepto de evapotranspiración para englobar a ambos. 

De la teoría a la práctica

La Dra. Cristina Chinchilla, agrónoma del Centro de Investigación en Contaminación Ambiental (CICA) de la Universidad de Costa Rica y Coordinadora líder del proyecto Regional, comentó que “aprendimos cómo muestrear el suelo y extraer el agua para hacer el análisis de isótopos que nos va a permitir determinar cuál es la evaporación y la transpiración de un sistema productivo y cómo nosotros podemos disminuirla para evitar la pérdida de agua”.

En ese contexto, consultada sobre las siguientes fases de este proyecto, Cristina señaló que “ahora cada país va a proponer su técnica de mitigación, ello mediante el uso de isótopos. En tanto, en la siguiente fase del proyecto haremos un nuevo llamado a control de los resultados obtenidos”.

El curso fue dirigido por el experto del OIEA, Leo Mayr, quien se mostró conforme con el desarrollo de esta jornada durante la semana: “con los conocimientos que obtuvieron los participantes, más las jornadas de práctica que realizamos en campo y laboratorio, confío que serán capaces de llevar estas prácticas a sus respectivos países para comenzar a experimentar”.

Cabe destacar que asistieron representantes de Argentina, Bolivia, Brasil, Costa Rica, Cuba, Ecuador, México, Panamá, Paraguay, Perú, Uruguay, República Dominicana y Chile, este último representado por funcionarios del Departamento de Tecnologías Nucleares de la CCHEN, de la Facultad de Ciencias Agronómicas de la Universidad de Chile, del Instituto de Investigaciones Agropecuarias (INIA – Cauquenes) y de la Facultad de Agronomía e Ingeniería Forestal de la Pontificia Universidad Católica.