Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia: Mujeres de hoy inspiran pasos STEM en mujeres del mañana

En 2015, la Asamblea General de las Naciones Unidas estableció el 11 de Febrero como el Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia, a partir de lo cual la UNESCO y ONU Mujeres se propusieron detectar y derribar barreras para promover una nueva generación de científicas con integración plena y equitativa.

En apoyo a ese objetivo surge el nuevo programa Inspirando Pasos STEM de la Comisión Chilena de Energía Nuclear (CCHEN), en el marco de su Agenda de Género 2018-2022. Para recordar, STEM (por sus siglas en inglés) es el acrónimo de Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas.

Esta iniciativa, que nació en octubre de 2020, complementa la participación de la CCHEN en el Proyecto SAGA (STEM and Gender Advancement), impulsado por la UNESCO, para fomentar una mayor participación de mujeres y niñas en dichas áreas.

Predicando con el ejemplo

Para dar vida al Programa “Inspirando Pasos STEM”, la CCHEN convocó a niñas y jóvenes vinculadas a funcionarias y funcionarios de la Institución. Estas Agentes STEM hoy son parte de un proyecto que busca estimular su interés, a partir de actividades en las que conocerán referentes femeninos y discutirán de las brechas existentes y sus desafíos. El objetivo es que ellas mismas se transformen en promotoras de ciencia y tecnología entre sus pares.

Las primeras actividades del Programa fueron charlas con mujeres que hoy se desempeñan en estas áreas, quienes tuvieron la misión de transmitir sus experiencias, para orientarlas en su futuro profesional, y mostrar con hechos la forma de ir derribando barreras y estereotipos.

La primera expositora fue Antonia Zambra Álvarez, geógrafa de la Pontificia Universidad Católica de Chile, que se desempeña en el Observatorio de Desigualdades de la Universidad Diego Portales. Mediante su charla, titulada “Mujeres en la ciencia: personas ordinarias que pueden hacer cosas extraordinarias”, entregó datos históricos de la contribución de mujeres en áreas en las que se estereotipa al hombre y se refirió a los desafíos del campo en el que se desempeña.

En sus palabras de cierre, Antonia enfatizó sobre la importancia de cultivar la curiosidad: “hagámonos preguntas constantemente, y lo más importante es no olvidar que tenemos la maravillosa capacidad de encontrar las respuestas”.

La segunda expositora fue Nuri Gras Rebolledo, Secretaria Ejecutiva de la Agencia Chilena para la Inocuidad y Calidad Alimentaria (ACHIPIA), y exfuncionaria de la CCHEN, institución donde formó y dirigió la Sección de Metrología Química y destacó por liderar proyectos de cooperación técnica con el Organismo Internacional de Energía Atómica, a partir de diversas aplicaciones de técnicas analíticas nucleares. 

En la oportunidad, Nuri no solo se refirió a su trayectoria profesional, sino que también contó cómo su vocación -ligada al sector alimentario- comenzó a gestarse desde su infancia. De ahí su sensibilidad por transmitir su testimonio a nuevas generaciones: “Me encanta motivar y trabajar con jóvenes, porque son quienes van a liderar nuestro futuro y por tanto, nuestras experiencias son una buena base de aprendizaje para ellas”, comentó Nuri Gras.

“Tanto Nuri como Antonia, con sus vocaciones, conocimientos y experiencias, son parte de un motor esencial que puede motivar los sueños de más niñas que buscan forjar su carrera en áreas STEM. Desde la CCHEN nos hemos propuesto ser portavoz de estos testimonios que pueden ayudarnos a predicar con el ejemplo”, señaló Marcela Ojeda Jaramillo, encargada de la Agenda de Género CCHEN

En esa línea, el Director Ejecutivo de la Comisión, Jaime Salas Kurte, comentó que “una forma en la que hoy podemos comenzar a cimentar un futuro – espero cercano – en el que nos enorgullezcamos de evidenciar una mayor equidad de género, es a través de iniciativas que visibilicen figuras femeninas destacadas que logren capturar el interés de más mujeres referentes a las áreas STEM.

Nuestras Agentes STEM: Avril, Martina, Javiera, Eleonor (con apoyo de Cata), Francisca (y Javiera).

De nanosatélites, plasma y neutrones: proyectos adjudicados por investigadores de la CCHEN en el Fondecyt Regular 2021

Tres proyectos FONDECYT Regular 2021, de la Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo (ANID), fueron adjudicados a investigadores del Laboratorio de Plasmas y Fusión Nuclear de la Comisión Chilena de Energía Nuclear (CCHEN), los que recibirán un total de 600 millones de pesos para financiar sus actividades de investigación por los próximos cuatro años.

El proyecto “Miniaturized plasma thruster for Cubesat nanosatellites”, en español, esencialmente, propulsores de plasma para nanosatélites, es parte de la exploración espacial de Chile para obtener información sobre las propiedades de nuestro territorio, así como la posibilidad de apoyar la investigación en astrofísica. El responsable principal del proyecto es el Dr. Leopoldo Soto, apoyado por los coinvestigadores, Dr. Cristian Pavez, del Departamento de Ciencias Nucleares de la CCHEN; y Dr. Marcos Díaz, del Laboratorio de Exploración Espacial y Planetaria de la Universidad de Chile.

“Esta investigación se sustenta en la experiencia del Laboratorio de Plasmas y Fusión Nuclear de la CCHEN, en construir dispositivos de plasmas pulsados muy pequeños (ver aquí), y en la experiencia del Laboratorio de Exploración Espacial y Planetaria de la Universidad de Chile en el desarrollo de nanosatélites”, comentó Leopoldo Soto.

El Laboratorio de la U. de Chile puso en órbita, en 2017, el primer nanosatélite tipo CubeSat diseñado y construido en Chile, el SUCHAI-1. Los CubeSats han revolucionado la industria, al permitir recolectar datos de todo tipo desde la órbita terrestre. Son nanosatélites artificiales, diseñados con un tamaño establecido. En las siguientes misiones, es necesario que el SUCHAI se reoriente en su órbita para tomar imágenes de la Tierra o de otros puntos del universo. Este es el foco del proyecto Fondecyt, que busca diseñar y construir un propulsor de plasmas para la orientación de satélites pequeños.

El proyecto “Fundamental research in low energy plasma focus discharges in a highly efficient neutron production regime”, cuyo investigador principal es el Dr. Cristian Pavez, propone un barrido experimental sistemático de las variables que podrían influir en el desempeño de la descarga eléctrica que crea un plasma y, particularmente, en la producción de los neutrones que resultan de los fenómenos de fusión nuclear que ocurren en ese estado de la materia, en presencia de un gas de deuterio. “Para esta evaluación, emplearemos diferentes técnicas de diagnóstico, que se implementarán en forma simultánea”, indicó.

Hoy los campos pulsados de neutrones de fusión y rayos X de alta energía son de gran interés en investigación fundamental, pero, especialmente, en aplicaciones críticas como la búsqueda de nuevas terapias para tratar el cáncer. También, la dosimetría de campo pulsado es un área abierta de desarrollo, para avanzar con tecnologías innovadoras para combatir el cáncer y proteger a los pacientes, con menores dosis de radiación, mucho más focalizadas.

“Las investigaciones de este proyecto son clave, por cuanto se estudian procesos muy eficientes en la producción de pulsos de neutrones, los que podrían ser utilizados en terapias médicas complementarias”, puntualizó Cristian Pavez.

Contará con el apoyo de los coinvestigadores Dr. Gonzalo Avaria y Dr. Leopoldo Soto, ambos del Departamento de Ciencias Nucleares de la CCHEN, y del Dr. Julio Valenzuela, del Instituto de Física de la Universidad Católica de Chile. También colaborará el Dr. Francisco Molina, del mismo Departamento de la CCHEN, el Dr. Ariel Tarifeño-Saldivia, de la Universidad Politécnica de Cataluña (España), y el Dr. Daniel Klir de la Universidad Técnica Checa de Praga (República Checa).

Un tercer proyecto adjudicado fue el presentado por el Dr. Gonzalo Avaria, bajo el título “Zeeman effect spectroscopy measurements for magnetic field characterization of a sub-kJ plasma focus discharge”. Se inserta en el área de la espectroscopía, una muy importante rama, de amplia aplicación para conocer qué ocurre en la intimidad del átomo, que es invisible a nuestros ojos. Zeeman es el apellido de un fisico holandés, uno de los primeros Premios Nobel de la historia, que notó cambios en la composición de la luz emitida por los átomos de un gas, cuando el gas se encontraba bajo un campo magnético.

Así, cuán grande o pequeño es el efecto da una medida precisa del campo magnético presente, el que, en el caso de los plasmas, es producido por la intensa corriente de la descarga.

“Queremos entender cuánta corriente está realmente pasando por el plasma en esa etapa, para mejorar las simulaciones y el entendimiento que hay de estos fenómenos en descargas de plasma como las que tenemos en nuestro laboratorio”, explicó Gonzalo Avaria.

El investigador añadió que “el estudio de las descargas pulsadas de plasma ha tomado gran relevancia internacional en estos últimos años, siendo útil, por ejemplo, para detectar sustancias ilícitas, al tratarse de fuentes muy intensas de pulsos de neutrones y radiación. Comprender los fenómenos elementales que ocurren en la descarga es una oportunidad para mejorar el diseño de estos dispositivos, haciéndolos más eficientes y aumentando la emisión de radiaciones que se requiera, de acuerdo a su aplicación”, agregó.

Como coinvestigadores participarán el Dr. Cristian Pavez, del Departamento de Ciencias Nucleares de la CCHEN, el Dr. Julio Valenzuela, del Instituto de Física de la Universidad Católica de Chile, y el Dr. Marcelo Ruiz, del Departamento de Física de la Universidad Técnica Federico Santa María.

Para Luis Huerta, jefe de la División de Investigación y Aplicaciones Nucleares de la CCHEN, “la ciencia es la base de las soluciones, especialmente de un mundo tan complejo e interconectado, donde mover una pieza en un lugar tiene efectos que pueden ser muy devastadores en otro lugar. Por eso, hay que conocer cómo funciona la naturaleza y, también, los objetos que construimos. Y todo eso es posible gracias a un trabajo en equipo, donde investigadores y coinvestigadores aportan”.

Huerta agrega que “este es un logro que celebro, porque viene de investigadores que mantienen su espíritu, su vocación y sus ganas de descubrir nuevas cosas. Lo que ellos aportan a las capacidades de investigación de la CCHEN no está demasiado lejos de lo que, institucionalmente, podemos aportar a la I+D en recursos frescos”.

Proyectos adjudicados:

(1)”Propulsor de plasma miniaturizado para nanosatélites CubeSat”.
(2)“Investigación fundamental en descargas plasma focus de baja energía en un régimen de producción de neutrones altamente eficiente”.
(3)”Mediciones espectroscópicas del efecto Zeeman para la caracterización del campo magnético en una descarga Plasma Focus de baja energía”.

Ahora ya puedes usar tu Clave Única en cchen.cl

Se informa a los usuarios/as que ingresan a cchen.cl, ya sea para solicitar productos o servicios a través del Portal de Trámites Digitales o bien, para contactarse con la Oficina de Información, Reclamos y Sugerencias (OIRS), que ya está habilitada la opción de usar Clave Única.

En el caso del sitio web de la Comisión Chilena de Energía Nuclear, la Clave Única está disponible para personas naturales que requieran realizar alguno de los siguientes trámites:

Portal de Trámites Digitales: https://negocios.cchen.cl/portalcompras/Servicios/servicios.aspx

  • Productos como radioisótopos y radiofármacos, juegos de reactivos para marcación
  • Servicios de protección radiológica}
  • Servicios de irradiación y caracterización
  • Servicios de seguridad nuclear y radiológica

En caso de consultas o comentarios, contactar a soporte@cchen.cl

Oficina de Información de Información, Reclamos y Sugerencias (OIRS):
https://oirs.cchen.cl/cchen_siac/index.php?option=com_siac&Itemid=3

En caso de consultas o comentarios sobre el uso de la Clave Única en la página de la OIRS, contactar a oirs@cchen.cl

Registro en cchen.cl

Independiente de contar con Clave Única, es indispensable que el usuario/a esté, previamente, registrado en cchen.cl, para lo cual debe incluir un RUN. Una vez que este registro es efectivo, puede optar por ingresar su dicho usuario y contraseña, o bien, con su Clave Única.

Finalmente, cabe recordar que se trata de una iniciativa de Gobierno Digital, que busca proveer a los ciudadanos/as de una Identidad Electrónica Única (RUN y contraseña) para la realización de trámites en línea del Estado. Ver más.

CONAF Región Metropolitana firma convenio con CCHEN e Inmobiliaria Lo Aguirre para combatir incendios forestales

En el marco de convenios de colaboración, las instituciones del sector público y privado apuestan por un trabajo coordinado, que permita fortalecer la prevención y rápida respuesta ante posibles siniestros que pudieran afectar la zona.

En la Brigada de Incendios Forestales Roble-3, frente al Centro de Estudios Nucleares Lo Aguirre, se realizó la firma de convenios de colaboración entre la Corporación Nacional Forestal (CONAF) Región Metropolitana, la Comisión Chilena de Energía Nuclear (CCHEN) e Inmobiliaria Lo Aguirre, con el objetivo de buscar la minimización de riesgos, en caso de incendios forestales que puedan afectar al sector.

De esta forma, los documentos fueron firmados por el director de CONAF RM, Sr. Álex Madariaga Jara, el director ejecutivo de la CCHEN, Dr. Jaime Salas Kurte y el director de la Inmobiliaria Lo Aguirre, Sr. Pedro Hurtado Vicuña; quienes se comprometieron a desarrollar todo cuanto esté a su alcance, en el marco de estos convenios, para la protección de las personas, los bienes y el medioambiente.

En lo concreto, mediante este convenio de carácter indefinido, la CCHEN se compromete a apoyar con monitoreo permanente, ya sea a través de cámaras o de inspecciones en terreno, la zona natural contigua a los Centros de Estudios Nucleares La Reina y Lo Aguirre, para contribuir a la detección temprana de cualquier foco de incendio forestal, y CONAF RM, por su parte, a realizar trabajos de prevención y combate de incendios forestales en los sectores que puedan afectar a las instalaciones de la Comisión.

Por otra parte, Inmobiliaria Lo Aguirre aporta con el terreno e infraestructura a la brigada, a través de un convenio, para que sea posible que la misma esté ubicada en Lo Aguirre, siempre dispuesta a asistir y combatir posibles incendios forestales en la zona.

Álex Madariaga, director de CONAF Región Metropolitana, aseguró que “como CONAF estamos muy felices y complacidos de poder concretar el hecho de tener una brigada en Lo Aguirre que pueda proteger el entorno, el patrimonio natural, a las familias e infraestructuras críticas, como es el caso de CCHEN, con quien firmamos un convenio de círculo virtuoso junto a Inmobiliaria Lo Aguirre, ya que se unen los esfuerzos y alianzas del Estado y del sector privado para ofrecer beneficios que cuiden y salvaguarden a la comunidad”.

En esa línea, el director ejecutivo de CCHEN, Jaime Salas, enfatizó que “realizamos y continuaremos desarrollando todas las acciones para fortalecer las capacidades de preparación y respuesta a emergencias, que hemos construido en la Comisión, y en este camino, agradecemos todo el apoyo que podamos obtener de aliados, como en este caso lo es la CONAF”.

A su vez, Pedro Hurtado, director ejecutivo de Inmobiliaria Lo Aguirre comentó que “estamos muy contentos de poder firmar este convenio junto a CONAF Región Metropolitana, ya que tendremos a la brigada Roble 3 acá en el territorio y estoy seguro que van a cuidar el patrimonio forestal; así que agradecemos a CONAF y ojalá que esta temporada de incendios forestales no sea tan exigida para que los recursos naturales no se vean tan afectados”.

La CONAF, a través de su Departamento Protección y Control de Incendios Forestales, es responsable de prevenir y combatir incendios forestales, los que cada vez son más agresivos y afectan grandes superficies del patrimonio particular y estatal.

Por eso, la detección oportuna de los focos de incendios forestales permite movilizar en forma eficaz los recursos para trabajar en su control en forma rápida y eficiente, y así evitar, además, que se transformen en grandes superficies afectadas, que requieren, para su control, de complejas estructuras organizativas.

A propósito del 14 de diciembre de 2020

Nada nos habla con tanta fuerza y claridad del tiempo, ni del devenir de la existencia humana, en relación a la naturaleza; ni tampoco nos relaciona con otros momentos de nuestra civilización de modo tan elocuente, ni nos conecta con tanta curiosidad con otros mundos habitados o inhabitados, para sumergirnos de manera ineludible en un tiempo y espacio de escala infinitamente superior a los de nuestra realidad. ¡Es día de eclipse!

¿Cada cuánto tiempo tenemos un eclipse de sol? Si me pierdo este, ¿cuál es el próximo? ¿Lo verán mis futuros nietos y nietas? ¿Ocurren eclipses en cualquier parte de la Tierra? ¿En la Antártica, por ejemplo? ¿Todos los planetas tienen eclipses de sol?

¿Qué te hace pensar el eclipse a ti?

A mí, además del tiempo, me hace pensar en geometría. Desde el colegio algo sabemos de eclipses. Posiciones de unos respecto de otros, líneas que, trazadas desde el Sol, marcan la sombra y la penumbra sobre la superficie de la Tierra. La Luna se interpone entre el Sol y la Tierra y dejamos de ver el Sol por unos minutos. Para entenderlo, representemos al Sol como una naranja; a la Tierra, como un níspero; y a la Luna, como una bolita de acero.

Sabemos que la Luna es en extremo pequeña, comparada con el Sol (unos 3500 km de diámetro contra casi un millón y medio del Sol). Sin embargo, si se halla lo suficientemente cerca de la Tierra, puede eclipsar al Sol. Y, efectivamente, es así: la Luna está a una distancia tan corta y precisa, que puede verse del mismo tamaño que el Sol y de este modo, puede taparlo casi de manera perfecta.

Siempre hay detalles: cuando la Luna está un poco más lejos de la Tierra (la órbita lunar es elíptica), se ve más pequeña que el Sol, por lo que, en un eclipse total, la Luna no cubre por completo al Sol y queda, en el borde, un anillo visible. Es el eclipse anular.

A veces el eclipse es total, otras parcial. ¿A qué se debe?

Es un problema de ángulo de visión. Si quieres esconderte de mí detrás de un árbol, debes hacerlo en la línea de visión que yo tengo hacia el árbol. Así, para mí, que estés “detrás del árbol”, eclipsado por este, significa que estás en la misma línea de visión que yo tengo del árbol. Pero, otra persona que esté en una posición distinta, respecto del árbol, podrá verte, al menos parcialmente.

Esos son los dos tipos de eclipse: total y parcial, los que reflejan, además, que este acontecimiento se ve distinto desde diversos lugares de la Tierra, porque varían las líneas de visión al Sol.

Si el Sol, la Luna y yo en la Tierra estamos en una misma línea, esto es, todos perfectamente alineados, se observará un eclipse total. Si desde donde miramos hacia el Sol, la línea de visión no incluye a la Luna, el eclipse será parcial, o quizás no habrá eclipse. En este eclipse solar del 14 de diciembre, solo en las regiones sureñas de La Araucanía y Los Ríos, y en una franja este-oeste de unos 100 km de ancho, se apreciará un eclipse total. Geometría pura.

¿En todos los planetas suceden eclipses solares?

Pensemos en la Tierra y la Luna, primero. ¿Podría ser distinta la historia y nunca ocurrir eclipses? De nuevo, es un problema de geometría.

Primero, si la Luna estuviera a una mayor distancia, o fuera más pequeña, la veríamos pasar frente al Sol, como una mancha oscura. Como vemos, por ejemplo, a Venus pasar frente al Sol (Figura 1). No sería un eclipse como lo entendemos; no es el apantallamiento total de la luz del Sol.

Figura 1. Venus “eclipsando” al Sol (https://apod.nasa.gov/apod/ap120607.html).

Pero, suponiendo que la distancia de la Luna a la Tierra es la óptima, tienen que cumplirse, además, ciertos requisitos geométricos en relación a las posiciones de unos sobre otros. ¿Cuáles son?

La órbita de la Tierra en torno al Sol es una elipse plana, esto significa que toda la trayectoria se encuentra en un plano imaginario conocido como eclíptica. Lo mismo ocurre con la órbita de la Luna respecto de la Tierra: también es una elipse plana. Sin embargo, ambos planos no coinciden y forman un pequeño ángulo de 5 grados entre sí (Figura 2). Hay que advertir que la realidad es un poco más complicada, porque esos planos orbitales oscilan realmente y el ángulo no es siempre el mismo. Pero la diferencia es tan pequeña que omitiremos ese detalle.

Entonces, con esta simplificación de planos fijos, lo importante a observar es que la órbita de la Luna cruza en algún momento y lugar el plano de la órbita terrestre. Así, en el momento en que la Luna llega a ese punto de cruce de la eclíptica, denominado nodo de la órbita, tendremos a la Tierra, la Luna y el Sol en el mismo plano. ¿Es el momento de un eclipse?

Figura 2. Se representan las órbitas de la Tierra en torno al Sol y de la Luna alrededor de la Tierra. Los tamaños y distancias no están a escala. Cada órbita forma un plano: la de la Tierra, la eclíptica, contiene al Sol; el de la órbita de la Luna, a la Tierra. Esos planos no coinciden sino que forman un ángulo entre sí. E igual que un cuchillo que corta una hoja de papel, ambos planos se intersectan en una línea (línea segmentada gris). Se muestra la situación un tiempo antes de que la Luna cruce la eclíptica. Para que haya eclipse, la Luna debe llegar al punto en que la órbita corta la eclíptica, el nodo C. En el momento en que la Luna cruza la eclíptica, Luna, Tierra y Sol se hallarán en un mismo plano, como si los tres astros se encontraran posados en la cubierta de una misma mesa. Bajo esa condición, hay posibilidades de eclipse. Sin embargo, a la vez, el punto C debe encontrarse en la línea de visión al Sol (línea segmentada naranja). En este caso, se ve, por lo tanto, que no habrá eclipse.

La respuesta es no. Además de ser necesario que los tres astros se encuentren en un mismo plano, deben hallarse situados en una misma línea, y esto no siempre ocurre. Es lo que muestra la Figura 2, donde puede apreciarse que en el momento en que la Luna llegue al nodo y cruce la eclíptica, Tierra, Luna y Sol no se hallarán alineados. En ese caso, habrá que esperar hasta la próxima vuelta, cuando la Luna vuelva a cruzar la eclíptica y la Tierra se haya movido un poco en su órbita, y el punto de cruce (nodo), se halle alineado con la línea de visión Tierra-Sol. Así, en algún momento, inevitablemente ocurrirá que el nodo coincidirá con la línea que une a la Tierra, la Luna y el Sol: ese será el día y hora del eclipse. En la Figura 3 se presenta esa situación. Esta alineación se produce entre dos y cinco veces al año, donde la ocurrencia de cinco eclipses es un caso muy raro y sucede cada algo más de 200 años.

Si la órbita de la Luna estuviera totalmente contenida en la eclíptica (se cree que en los inicios del sistema solar esto era así), entonces todo punto de la órbita lunar sería un nodo y solamente habría que esperar la alineación. ¿Cada cuánto tiempo habría un eclipse si esa fuera la situación?

Figura 3. Se representan dos momentos cercanos del movimiento orbital. Las distancias y tamaños no están a escala. Cada órbita, la de la Tierra en torno al Sol y la de la Luna alrededor de la Tierra, forma un plano. En este caso, el punto en que la órbita lunar cruza la eclíptica se encontrará en la línea de visión al Sol y habrá eclipse. En la figura de la derecha, producida la alineación, el eclipse hará que se proyecte una sombra sobre la Tierra (en la figura, es la mancha oscura sobre la imagen de la Tierra). En esa región sombreada, habrá eclipse total. En los lugares de la Tierra alrededor de esa sombra solo se observará un eclipse parcial, o simplemente no habrá, dependiendo cuán lejos estén esos lugares de la zona de sombra.

Por supuesto, cada vez que hay un eclipse, este será total o parcial, dependiendo si el lugar de la Tierra desde donde se mire al Sol se ubica justo en el lugar de la sombra. Así, habrá más de un eclipse total al año, pero en distintos lugares de la Tierra.

¿Se te ocurre, entonces, qué debe investigarse para tener la respuesta de si habrá eclipses solares en otros planetas?

Todo es geometría. Aunque es necesario que los cuerpos orbiten uno respecto de otro: la Tierra respecto del Sol, y la Luna respecto de la Tierra. Esto último es consecuencia de la gravitación, responsable de que, efectivamente, los cuerpos den vueltas uno en relación al otro. Gravitación y geometría, entonces, se confabulan para producir este hermoso espectáculo donde la Luna se interpone en la línea de visión del Sol.

Cuando ocurre el eclipse, la Tierra se oscurece, y como la Luna tiene el tamaño preciso y se halla a la distancia justa para cubrir la esfera solar, podemos ver la corona del Sol, un verdadero festival, lleno de fenómenos que posibilitan a la ciencia entender cómo se desenvuelve la dinámica tormentosa de ese plasma denso y caliente que resulta de las reacciones nucleares que tienen lugar en el Sol.

Por si fuera poco, en esa oscuridad también es posible ver las estrellas. Después de algunas mediciones, los astrónomos podrán constatar, durante un eclipse, que la luz de algunas de las estrellas que ha pasado cerca del Sol hasta llegar a nosotros, ha seguido una trayectoria curva. Es una medición compleja, que necesita mucha precisión. Gracias a ello comprobamos la increíble predicción de Einstein de que el espacio se curva alrededor del Sol y eso modifica la trayectoria de la luz.

La primera vez que se observó y midió el fenómeno de la curvatura del espacio fue en 1919, convirtiéndose en la primera prueba de que la teoría de la gravitación de Einstein, que corrige la Ley de Newton de la gravitación universal, era correcta. Fue el día en que Einstein saltó a la fama. Esa historia será motivo de otra conversación.

Un dato final: el próximo eclipse total será en diciembre de 2021, y a mitad de año habrá un eclipse anular. ¿Dónde te imaginas que se verá? ¡En la Antártica!

He contestado solo algunas preguntas. Otras te las dejo a ti. De seguro tienes nuevas dudas surgidas a partir de este texto. Y si es así, he logrado mi propósito de despertar tu curiosidad, porque tal como dijo Einstein alguna vez: lo importante es hacerse preguntas.

Luis Huerta Torchio
Jefe División de Investigación y Aplicaciones Nucleares
Comisión Chilena de Energía Nuclear