Para proteger a las personas y al medio ambiente se estudian en Chile los contaminantes orgánicos persistentes

Asistentes al taller

Un total de 20 representantes de 10 países de América Latina y el Caribe participaron en un taller que abordó los aspectos comunicacionales del proyecto “Mejorando la gestión de la contaminación por Contaminantes Orgánicos Persistentes (COPs) para reducir el impacto sobre las personas y el medio ambiente” (RLA 5069), realizado durante abril en Quito, Ecuador.

Durante esta actividad, profesionales del área técnica y comunicacional, provenientes de Argentina, Bolivia, Colombia, Costa Rica, Ecuador, México, Paraguay, República Dominicana, Uruguay y Chile, se coordinaron para la difusión de este proyecto, mediante la elaboración de una estrategia y un plan de comunicaciones para el periodo 2019-2020. Desde Chile, asistieron dos representantes del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) y de la Comisión Chilena de Energía Nuclear (CCHEN).

Cabe destacar que este proyecto, parte del Acuerdo Regional de Cooperación para la Promoción de la Ciencia y la Tecnología Nucleares en América Latina y el Caribe (ARCAL), estudia el grado de exposición a los COPs al que las personas y el medio ambiente están sometidos y, en esa línea, busca establecer políticas de protección a dicha exposición.

Por eso, parte del programa de trabajo se ha basado en el estudio analítico, a través de tecnología acorde para la identificación de estos compuestos en muestras ambientales y de alimentos, para determinar el impacto de una posible contaminación.

Dado que se trata de un proyecto regional, Chile, a través del Subdepartamento Química e Inocuidad de los Alimentos del SAG, se encuentra apoyando a otros laboratorios de la región con la difusión de la técnica implementada y misiones de experto.

Sumado a lo anterior, en el marco de este proyecto, profesionales de los países participantes han asistido a una serie de talleres y capacitaciones sobre análisis de riesgo y exposición de los COPs, estrategias de toma de muestras, implementación y transferencia de la técnica analítica y validaciones.

Los COPs son sustancias químicas orgánicas, de origen sintético, resistentes a la degradación y bioacumulación en el ambiente, llegando incluso a lugares donde nunca se han usado o producido.  Dado sus variados niveles de toxicidad, son responsables de impactos negativos en el medio ambiente y en la salud de las poblaciones expuestas.

“Queremos contribuir a mejorar la calidad ambiental y reducir la exposición humana a contaminantes orgánicos persistentes. Por eso, además de los análisis que hemos estado realizando, identificaremos grupos de riesgo clave y posible áreas contaminadas, de modo de ayudar en el establecimiento de políticas de mitigación”, señaló Pedro Enríquez, jefe del proyecto en Chile y jefe del Subdepartamento Química e Inocuidad de los Alimentos del SAG.

Continuando con el programa de trabajo que se extenderá hasta el 2020, se desarrollará un ensayo interlaboratorio, junto con otras capacitaciones técnicas en la materia, para realizar, finalmente, una reunión de cierre de este proyecto.